Adelanto de la floración: La primavera llega antes de tiempo al campo Español.

Teniendo en cuenta que aún en algunas zonas donde se ha producido este suceso siguen en riesgo de heladas, entramos en una situación de peligro para este tipo de cultivos, que ponen en riesgo el cuajado de sus frutos.

La Falta de lluvias junto con las altas temperaturas que se están registrando durante todo el mes de febrero, están afectando seriamente el desarrollo de éstos y a otros cultivos de invierno.

Cultivos afectados:

Los cultivos de girasol que se deberían estar sembrando ya en las zonas del sur de España, están teniendo un retraso de las labores por falta de humedad en la tierra.

Las leguminosas que se suelen sembrar entre febrero y marzo están teniendo nascencia irregular y en algún caso no han nacido todavía.

También las faltas de reservas hídricas están provocando el debilitamiento de la planta en un período que debería ser de pleno desarrollo del pasto de cara a la primavera. Esta situación está causando grave preocupación entre los ganaderos que verán aumentados los precios de la alimentación del ganado, si definitivamente no hay una mejora en el desarrollo del alimento natural.

Los árboles frutales y frutos secos se están viendo perjudicados, por la falta de agua y por las altas temperaturas que está causando el adelanto de la floración, especialmente en el Almendro. Dado que esta planta es muy sensible a las bajas temperaturas en plena floración, el problema puede aparecer si en las próximas semanas hubiera una bajada de temperaturas significativas.

En referencia al cultivo de olivar todavía se está recogiendo en algunas zonas, pero ya está prácticamente finalizada y ya han empezado las tareas de poda, abonado y tratamiento de primavera. Los agricultores esperan que llueva pronto para que se reactive la planta. La falta de agua durante estos meses podría perjudicar seriamente la próxima cosecha de aceituna, sobre todo, si la primavera viene seca.

Los cereales que se encuentran ahora en pleno periodo de crecimiento, se ven afectados por la falta de agua, que junto con las altas temperaturas hacen más difícil el desarrollo de este tipo de cultivos, padeciendo una importante degradación y poniendo en peligro la próxima cosecha, de no llover en breve. La cosecha esperada podría ser de sobre unas 53.000 (El pasado año que fue mejor, se llegaron a producir 62.000Tn) toneladas para la cebada y en torno a las 15.000 toneladas para el trigo.